Papel de los padres en la formación de las comunidades

Los seres humanos, independientemente de su nacionalidad, etnia, religión, idioma, profesión o estatus social, siempre deben ser agradecidos con sus padres. El hombre, ya sea un budista asiático, un reparador de líneas de metro en Okinawa, un profesor universitario de Mumbai, un trabajador iraní de la escuela Shia, un árabe sunní cocinero en un hotel de cinco estrellas en Beirut, un oficial de la policía católica negra en South África, un estadounidense, un bombero en Boston o un ateo indio en México, todos han heredado su existencia en este mundo de sus padres.

Los padres no son meramente los orígenes de nuestra vida y existencia biológica, sino que también son nuestros primeros y más importantes maestros que asumieron responsablemente el deber de nuestra educación, haciendo cada sacrificio por nosotros sin esperar nada a cambio, desde el momento en que nacimos hasta que llegamos a la edad de madurez.

Para brindarnos la educación adecuada, nuestros padres no solo trabajaron arduamente para apoyarnos financieramente, sino que también hicieron todos los esfuerzos, basados ​​en sus características femeninas o masculinas, para cultivar en nosotros los espíritus del honor, la generosidad, el coraje y la responsabilidad. También nos enseñaron a manejar nuestras emociones y nuestra ira y nos ayudaron a desarrollar muchos otros aspectos de nuestra naturaleza, fomentando nuestros talentos y preparando las bases para que la autoestima se desarrolle como parte de nuestra personalidad.

Estas importantes funciones de los padres muestran la importancia de la familia basada en el matrimonio como el bloque de construcción más pequeño y más importante de todas las comunidades. [2] Estos hechos muestran, por un lado, la importancia de la familia basada en el matrimonio en el desarrollo de cada sociedad y, por otro lado, la simplicidad y la superficialidad de los sistemas occidentales que han socavado la constitución del matrimonio al autorizar la formación de relaciones ilegítimas y familias en concubinato. Al legalizar las relaciones ilegítimas y las familias no casadas, e incluso el matrimonio homosexual, los llamados sistemas legales modernos han permitido que los niños sean criados en atmósferas inestables y anormales, causando daños irreparables en el futuro de sus propias comunidades.

En cualquier caso, el hombre siempre entiende la necesidad de respetar a sus padres basándose en su naturaleza y en sus emociones originales. Esta es la razón por la que casi todas las naciones han dedicado un día del año a la conmemoración de los padres como una ocasión en la que las personas pueden visitar a sus padres, comprarles algunos regalos, llevarlos de viaje o mostrarles su amor y gratitud de alguna otra manera.

 

La gran importancia de los padres en las enseñanzas islámicas

Como se discutió anteriormente, las emociones del hombre y la naturaleza de búsqueda de la verdad lo llevan a respetar y agradecer a sus padres. Sin embargo, cuando se trata de las enseñanzas islámicas, la gratitud hacia los padres no se limita al día anual de los padres y un simple festival de un día para ellos. El Islam instruye a sus seguidores a tener a sus padres en gran estima a lo largo de sus vidas.

El sagrado Corán, que es la fuente principal de las enseñanzas islámicas en todas las escuelas islámicas, ha hecho hincapié en el respeto y el hacer el bien a los padres. Cuatro versículos del Corán mencionan este mandato justo después de la ordenanza sobre la enseñanza principal de Monoteísmo, [3] que manifiesta claramente la importancia de la cuestión de honrar a los padres. Como ejemplo, mencionamos los siguientes versículos:

 “Y [recuerda] cuando hicimos un pacto con los Hijos de Israel: «Solamente adoraréis a Dios. Sed buenos con vuestros padres, con vuestros familiares, con los huérfanos y los necesitados. Hablad bien a las personas. Estableced la oración y cumplid con la limosna obligatoria.» Después, excepto unos pocos, os apartasteis e incumplisteis.” (2: 83)

“Y adorad a Dios y no adoréis nada junto a Él. Y sed buenos con vuestros padres, con vuestros familiares, los huérfanos, los necesitados, los vecinos cercanos y los vecinos lejanos, con el compañero de viaje, con el viajero y con vuestros esclavos. En verdad, Dios no ama a quien sea un fanfarrón arrogante.” (4: 36)

“Tu Señor ha decretado que no adoréis nada excepto a Él y que tengáis el mejor comportamiento con vuestros padres. Si se hace mayor junto a ti uno de ellos o ambos, no les digas «¡Uf!» ni les grites, sino que, más bien, háblales con palabras dulces y tiernas.” (17: 23)

En otro versículo del Corán, la gratitud a los padres se ha comparado con la gratitud a Alá por Sus innumerables recompensas:

“Y encomendamos al ser humano con respecto a sus padres - Su madre le llevó, soportando debilidad sobre debilidad, terminando su lactancia a los dos años-: «¡Sé agradecido conmigo y con tus padres! ¡A Mí regresáis!»”  [4]

Del mismo modo, respetar a los padres y ser amable con ellos ha sido muy enfatizado en las narraciones islámicas. Por ejemplo, según un hadiz del Profeta (PBD), el solo hecho de mirar a los padres con amabilidad y respeto ha sido llamado un acto de adoración. [5]

De hecho, así como la creencia en la Unicidad de Dios y la gratitud hacia Él constituyen la creencia fundamental de cualquier musulmán, respetar a los padres y tratarlos con amabilidad tiene el mismo nivel de importancia en el marco de las enseñanzas islámicas.

 

Algunos consejos sobre la mejor manera de tratar a los padres

Junto con la actitud general del Islam con respecto a la importancia de respetar a los padres, las enseñanzas islámicas están llenas de pautas prácticas detalladas sobre cómo tratar a los padres con amabilidad y respeto. Algunas de estas pautas son las siguientes:

• La persona debe abstenerse de hablar irrespetuosamente con los padres y debe hablarles con respeto en todo momento. [6]
• Al momento de suplicar a Allah, la persona también debe implorar a Dios que bendiga a los padres y les muestre misericordia. [7]
• La persona debe evitar enojar a los padres. [8]
• Nunca se debe caminar delante de los padres, sentarse antes de que se sienten o llamarlos por su nombre; También se debe hacer todo lo posible para evitar que se dañe su buena reputación. [9]
• Después de que los padres fallecen, la persona debe implorar a Dios que los perdone y también debe pagar sus deudas.

Al tener en cuenta la actitud general de las enseñanzas islámicas y seguir estas pautas prácticas, todos los seres humanos podrán garantizar su prosperidad y dar un buen ejemplo para que sus hijos transmitan a las generaciones futuras la mejor manera de tratar a los padres.

 

Notas

[2] Makarem Shirazi, Tafsīr Nemūneh. Editor: Dār al-Kutub al-Islāmiyyah, Teherán. 10ª ed., 1371 S. vol. 21, p. 334.

[3] ver: Al-Baqarah, 83; al-Nisā ', 36; al-An'ām, 151; al-Isrā ', 23.

[4] ver: Luqmān, 14.

[5] Majlisī, Muhammad Bāqir ibn Muhammad Taqī. Biḥār al-Anwār. Editor: Dār Iḥyā 'al-Turāth al-'Arabī, Beirut. 2ª ed., 1403 H. Vol. 71, p. 80.

[6] ver: Al-Isrā ', 24.

[7] Kulaynī, Muhammad ibn Ya'qūb ibn Is-ḥāq. Al-K āf ī. Investigado por: Ghaffārī, y Ākhundī, editor: Dār al-Kutub al-Islāmiyyah, Teherán. 4ª ed., 1407 H. Vol. 2, p. 349.

[8] Kāfī, vol. 2, pp. 158-159.

[9] Kāfī, vol. 2, p. 163.