El punto de vista islámico sobre el tema de los refugiados

El punto de vista islámico sobre el tema de los refugiados


Según las estadísticas publicadas por las organizaciones internacionales, entre 43 y 50 millones de personas en el mundo han abandonado sus países natales y han huido a otros países debido a la discriminación racial, religiosa o las amenazas sociales, económicas o de seguridad.‌

Los refugiados y el derecho internacional

Según las estadísticas publicadas por las organizaciones internacionales, entre 43 y 50 millones de personas en el mundo han abandonado sus países natales y han huido a otros países debido a la discriminación racial, religiosa o las amenazas sociales, económicas o de seguridad. Este número es mayor que la suma total de la población de los países de Kuwait, Irlanda, Noruega, Finlandia, Singapur, Dinamarca, Suiza y Austria.

Estos refugiados se han visto obligados a abandonar sus casas, trabajos y fincas y, a veces, emprender viajes de miles de kilómetros a países extranjeros con idiomas, religiones y costumbres completamente diferentes en busca de una vida honorable y un lugar en donde puedan cumplir con sus necesidades básicas.

En el mundo de hoy, la solución de este problema de los refugiados, está muy lejana. El número de refugiados aumenta a medida que la guerra y la inseguridad siguen asolando varios rincones del mundo más que antes. Mientras tanto, los refugiados tienen esperanzas en el derecho internacional del apoyo a los refugiados, al menos según lo que está escrito. Por ejemplo, los artículos 13 y 14 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos reconocen los derechos de los refugiados quienes han abandonado sus países hacia otros países, huyendo de la persecución y la tortura. También otorgan a los refugiados el derecho de viajar libremente por todos los países o refugiarse en ellos.

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados [ACNUR] también se compromete a hacer todo lo posible para proteger y apoyar a los refugiados y brindarles ayuda independientemente de su género, raza, religión y opiniones políticas.

 

La hipocresía de los llamados defensores de los derechos humanos sobre los refugiados

Hoy en día, debido a las enseñanzas islámicas que instruyen a los musulmanes a ser amables con sus semejantes, los países islámicos ahora albergan el mayor número de refugiados en el mundo. Según las últimas estadísticas de organizaciones internacionales, la mitad de los refugiados del mundo ahora viven en Irán, Pakistán, Turquía, Líbano, Jordania, Chad y Sudán. Sin embargo, los estados europeos ricos que siempre afirman ser los grandes defensores de los derechos humanos y los redactores de las leyes internacionales están al final de la lista de países que albergan refugiados.

Desafortunadamente, algunos de los llamados monarcas musulmanes de los estados árabes del Golfo Pérsico, junto con los países occidentales avanzados, muestran el menor interés en ayudar o albergar refugiados en sus países.

Mientras tanto, dos puntos demuestran mejor la duplicidad e irresponsabilidad de los países occidentales con respecto a los refugiados:

Según las estadísticas oficiales publicadas por agencias internacionales, dos tercios de los refugiados del mundo son de países devastados por la guerra de Palestina, Siria, Afganistán, Sudán del Sur, Myanmar y Somalia. Estos son los mismos países que han sido destrozados por la intervención directa de los países occidentales o por sus guerras indirectas.

Durante los últimos años, los países occidentales han aprobado leyes estrictas que prohíben o limitan la entrada de refugiados a sus países. Algunos de estos países incluso cerraron sus fronteras a los solicitantes de asilo, causando grandes desastres humanos al permitir que los solicitantes de asilo se congelen en el frío o se ahoguen en los mares detrás de sus fronteras.

Las escenas más horribles del maltrato a los refugiados se pueden ver en las imágenes de los refugiados mantenidos en jaulas en la isla de Manus por el gobierno australiano. También en las noticias se pueden ver con frecuencia imágenes de los cadáveres de los niños iraquíes y sirios ahogados en el mar Mediterráneo. Estas imágenes son una mancha de vergüenza para los llamados defensores occidentales de los derechos humanos.

 

La historia de los derechos de los refugiados en el Islam

Siglos antes de la formación de los sistemas políticos de las naciones-estado, las organizaciones internacionales como las Naciones Unidas o el ACNUR, o la redacción de declaraciones como la declaración de los derechos humanos, los musulmanes trataron a los refugiados con amabilidad y humanidad basándose en las enseñanzas morales de su religión.

De hecho, los musulmanes han actuado en base a las enseñanzas del Corán, la tradición del Profeta (PBD) y las instrucciones del Ahlul-Bait (P), junto con sus propias experiencias al enfrentar a los refugiados que se refugiaron en la comunidad musulmana a lo largo de todos los siglos pasados.

Estos principios son los siguientes:

Todas las personas oprimidas deben ser apoyadas y protegidas independientemente de sus orígenes religiosos o étnicos. Se ha narrado que el Profeta del Islam (PBD) ha declarado lo siguiente a este respecto: “Cualquiera que escuche la llamada de otro ser humano en busca de ayuda, pero no se apresura en ayudarlo, no es musulmán en absoluto” [1]

Como queda claro en esta narración, este principio se refiere a ayudar a todos los seres humanos y no solo a los musulmanes. También incluye la ayuda y el refugio a cualquier ser humano que haya huido de la guerra y la violencia en sus propios países.

 

El siguiente versículo en el Corán indica que los musulmanes tienen el deber de albergar y ayudar a todos los refugiados, incluso a los que no creen en Allah:

“Y si uno de los politeístas te pide asilo, ofréceselo hasta que oiga la palabra de Dios y luego hazle llegar a un lugar seguro para él. Eso es porque son un pueblo que no sabe.” (Corán, 9: 6)

Este mandato se debe a que hay esperanza de que cuando los refugiados no-musulmanes escuchan las palabras de Dios, puedan ser liberados de su estado de incredulidad y politeísmo, que es el resultado de su ignorancia y falta de conocimiento.

Los relatos históricos indican que una vez un hombre idolatra le preguntó al Imam Alí (P) si estaría a salvo en la comunidad musulmana para reunirse con el Profeta (PBD) y hacerle algunas preguntas. En respuesta a esta pregunta, el Imam Alí (P) le recitó el versículo antes mencionado. [2]

El derecho de otorgar asilo o refugio seguro a una persona es un derecho común de todos los musulmanes. Con respecto a este tema, el Profeta del Islam (PBD) declaró: “Si un creyente de menor rango social le otorga asilo a alguien, todos los musulmanes deben respetar su decisión.” [3]

Al explicar esta narración profética, se narra que el Imam Ṣadiq (P) dijo: “Si un ejército musulmán ha rodeado a un grupo de politeístas hostiles, y uno de los politeístas pide que se le conceda un salvoconducto para hablar con el comandante del ejército musulmán y uno de los musulmanes, incluso del rango más bajo de ellos, le otorga salvoconducto, incumbe a todo el ejército musulmán, incluidos sus comandantes de más alto rango, deben respetar este salvoconducto". [4 ]

Esta narración significa que el derecho de otorgar a alguien un salvoconducto o asilo no pertenece exclusivamente a los gobernantes musulmanes y ni siquiera necesita ser confirmado por él. De hecho, cada musulmán, en caso de que disfrute de una mente sana y haya tomado libremente esa decisión, puede otorgarle salvoconducto o asilo a un extranjero no musulmán para vivir libremente en la comunidad musulmana con su vida y riqueza protegidas.

Teniendo en cuenta estas enseñanzas sobre la permisibilidad de otorgar asilo o salvoconducto a los enemigos, está claro que es perfectamente permisible y legítimo que los musulmanes otorguen asilo a los musulmanes que sufren dificultades en sus países, o incluso a los no-musulmanes que no son hostiles contra los musulmanes.

 

Notas

[1] ( مَنْ سَمِعَ رَجُلًا يُنَادِي يَا لَلْمُسْلِمِينَ فَلَمْ يُجِبْهُ فَلَيْسَ بِمُسْلِم ) Kulaynī, Al-Kafi. Investigado por: Aliakbar Ghaffārī y Muhammad Ākhundī. Editor: Dār al-Kutub al-Islāmiyyah, 4ª ed., Teherán, 1407 h. Vol. 2, p. 164

[2] Makarem Shirazi, Naser. Tafs īr Nem ūneh . Editor: Dār al-Kutub al-Islāmiyyah. 10ª ed., Teherán, 1371 S. Vol. 7, p. 294.

[3] وَ يَسْعَى بِذِمَّتِهِمْ أَدْنَاهُم [al-Kafi, vol. 1, p. 403].

[4] al-Kafi, vol. 5, págs. 30-31.

 

Palabras clave : refugiados
captcha