El papel del hombre en la familia desde el punto de vista islámico

El papel del hombre en la familia desde el punto de vista islámico


La hombría: una característica que se origina de la naturaleza del hombre…  El hombre en la búsqueda del amor… El papel estratégico del hombre en la institución del matrimonio‌

El propósito de la creación de los seres humanos en este mundo es darles la oportunidad de prepararse para una vida eterna en el más allá, una vida que constituye el objetivo final de la creación humana. [1]

La creación de este mundo material ha sido una etapa inicial de creación que culminaría la creación de la humanidad en su camino hacia la perfección. Por lo tanto, la creación de la humanidad y su desarrollo espiritual hacia la perfección se conoce como el objetivo final de la creación. [2] Este hecho, sin embargo, no se habría realizado excepto con la otorgación del libre albedrío a la humanidad, tanto a los hombres como a las mujeres [3]. Esta habilidad excepcional les permite a los seres humanos elegir lo que desean, utilizar medios materiales para el crecimiento material y espiritual y, al final, alcanzar una vida feliz. [4]

De hecho, el hombre y la mujer en su creación, son como órganos de un solo cuerpo, y se completan mutuamente. [5]. Sin embargo, su desarrollo, ya sea material o espiritual, solo es posible dentro del marco de la familia. [6] Esto se debe a que el único sistema que puede lograr el reconocimiento social a través de la convergencia de hombre y mujer es el sistema familiar [7].

Por lo tanto, conocer la naturaleza del hombre es imposible sin conocer la naturaleza de la mujer, ya que el Creador ha creado al hombre y a las mujeres con los mismos medios con los que pueden alcanzar objetivos materiales y espirituales. Cabe destacar que la diferencia de género, física y fisiológica entre el hombre y la mujer y las diferencias en sus responsabilidades sociales no significan que uno sea superior al otro en términos de su desarrollo material y espiritual [8].

 

La hombría: una característica que se origina de la naturaleza del hombre

Obviamente, la ley más adecuada para cualquier ser es la que sea compatible con su naturaleza y su creación. [9] Por lo tanto, una ley adecuada que pueda asegurar el florecimiento político, social y familiar del hombre debe ser compatible con sus particularidades y necesidades naturales. [10] Una ley que ignora tantas diferencias existenciales entre el hombre y la mujer y no tiene en cuenta sus diferentes identidades y particularidades naturales será una ley injusticia tanto para hombres como para mujeres. Esto es claramente porque tal ley desviará al hombre del camino del desarrollo y privará a la mujer de sus derechos naturales y fundamentales. [11]

Por ejemplo, el hombre y la mujer disfrutan de diferentes diferencias físicas y fisiológicas que, a su vez, causan diferentes niveles de fuerza física y mental [12]. Como el hombre, en su naturaleza tiene más fuerza física y mental, sus responsabilidades sociales son más pesadas [13]. Por otra parte, a la mujer, que disfruta de un carácter más emocional, se le asignan las responsabilidades que coinciden con su carácter delicado [14].

Teniendo en cuenta estas diferencias drásticas entre el hombre y la mujer, ¿acaso es razonable actuar en contra de su naturaleza sobre la base de las leyes que se derivan únicamente de la razón humana y promueven la igualdad de género? Entre el hombre y la mujer existen diferencias sustanciales; por lo tanto, cualquier intento de crear una ley con respecto a ellos debe mantener el equilibrio entre la ley y las particularidades naturales del hombre y la mujer. Obviamente, el equilibrio puede establecerse no a través de la igualdad de género sino a través del reconocimiento de las diferencias de género y las necesidades de cada uno de ellos. La lógica también dicta que en lugar de la igualdad de género, la justicia debe ser la base de las decisiones y regulaciones [15].

 

El hombre en la búsqueda del amor

Dios ha creado al hombre para perseguir el amor y esforzarse por ganar el corazón y la atención de su amada. La mujer, por otra parte, ha sido creada para ser amada. Comprender esta diferencia inherente entre la naturaleza del hombre y la mujer es la clave para entenderlos correctamente y regular las leyes que cumplen con sus necesidades naturales. [16] Existe una famosa narración del Profeta (PBD) que es una prueba clara con respecto a este tema. En esta narración el Profeta (PBD) dijo:

Hay tres cosas que amo del mundo: amar a las mujeres (esposas), perfumarme, y realizar la oración, y entre ellas, la oración es la luz de mis ojos.” [18]

En las fuentes islámicas, existen otras narraciones similares que indican que amar a las mujeres es un signo de ser fiel y una costumbre de los profetas y justos. Por ejemplo, en otro hadiz del Profeta (PBD) leemos:

“Cuanto más se fortalezca la fe en Dios en los corazones de los creyentes, mayor será su amor por sus mujeres.” [19] [20]

En otra narración, el Imam Sadiq (P) dijo:

Una de las costumbres de los profetas fue su amor por sus mujeres.” [21] [22]

Vale la pena mencionar que, en muchas comunidades musulmanas y no musulmanas, es una costumbre que los hombres pidan la mano de las mujeres para el matrimonio, y no al revés. Esto también confirma el hecho de que la identidad del hombre es la de buscar y pedir el amor. [23] A pesar de esta realidad, en algunas religiones que fueron distorsionadas por sus sacerdotes, se promueve el monacato que requiere una vida de celibato. Los defensores del monacato creen que el vínculo matrimonial y el amor entre un hombre y una mujer son un obstáculo en el camino de la espiritualidad, como si el matrimonio fuera un acto satánico. Como resultado de esta desviación, se han producido grandes escándalos relacionados con el sexo en los monasterios, con la participación de monjes y monjas. A veces, estos escándalos son tan grandes que crean una verdadera crisis; en uno de esos casos, el Papa Inocencio III describió a uno de los monasterios como un burdel. [24] [25]

Los hallazgos sociológicos sobre el monacato del cristianismo demuestran que esta práctica tiene efectos negativos en los monjes y monjas y es una causa de depresión en ellos. Estos hallazgos también indican que el monacato puede dar lugar a trastornos psicológicos muy graves en esas personas [26]. [27]

Además, el celibato está en contra de la naturaleza del hombre y la mujer y tiene efectos destructivos en su salud mental y emocional. El celibato, puede causar trastornos psicológicos y conducir a inclinaciones homosexuales que amenazan la constitución del matrimonio. [28]

La cuestión desfavorable del monacato es el aislamiento social, y el abandono de las actividades sociales [29], lo que va en contra de las leyes existenciales de la naturaleza, y es una desviación de la naturaleza humana [30] que nunca se ha permitido en ninguna religión [31].

Como todas las demás religiones verdaderas, el Islam ha rechazado firmemente el monacato, algo que está bien reflejado en la siguiente narración del Profeta del Islam (PBD) donde dijo: “En el Islam no hay monacato.” Este rechazo absoluto del aislamiento social en el Islam se debe a que la religión otorga una gran importancia a la vida social del ser humano, que se realiza inicialmente a través del matrimonio. [32]

 

El papel estratégico del hombre en la institución del matrimonio

La humanidad tiene diferentes tipos de necesidades que pueden clasificarse en varias categorías distintas. Una de esas categorías son las necesidades sociales de la humanidad, que incluyen la necesidad del hombre de relacionarse con otras personas y vivir dentro de una comunidad. Cabe señalar que esta no es una necesidad creada por el mundo exterior, sino una necesidad inherente a la naturaleza humana. [33]

Los intentos para satisfacer tales necesidades sociales de hombres y mujeres llevan a la creación de la institución del matrimonio. Esta institución es creada para que el hombre asuma su papel especial dentro del marco de las obligaciones sociales, y está en línea con el objetivo general de la religión que guía a la humanidad hacia su perfección [34].

De hecho, los valores morales en las instituciones sociales como el matrimonio, que se derivan de la naturaleza humana, son obviamente iguales en todas las comunidades. Esto se debe a que, independientemente de su lugar de nacimiento, todos los seres humanos nacen con la misma naturaleza original y los mismos instin tos. Es esta misma naturaleza la que define a uno como ser humano y nunca sufre ningún cambio con el paso del tiempo [35]. Basados en esta necesitad natural de los seres humanos, todos los hombres y mujeres sienten un impulso natural hacia la institución del matrimonio, sin el cual llevar una vida normal es casi imposible para ellos. [36]

Cabe señalar que, a diferencia de otras criaturas que viven dentro de colonias y grupos, la vida social del hombre está profundamente arraigada en su necesidad de desarrollo, no simplemente en su instin to. Por lo tanto, el amor de un hombre por una mujer, además de que es un sentimiento natural, es un medio para asegurar su perfección. [37]

No hace falta decir que la gran comunidad humana consiste en unidades más pequeñas, es decir, las familias creadas a través del matrimonio. De hecho, las familias dentro de una sociedad son como ladrillos que construyen un gran edificio. Naturalmente, el fortalecimiento de las comunidades humanas depende del fortalecimiento de sus unidades más pequeñas, que son las familias. [38]

La institución del matrimonio, cuando se basa en valores correctos, puede, por un lado, jugar un papel importante en la regulación de las relaciones humanas y resolver los problemas personales y familiares y, por otro lado, desempeña un papel constructivo en la resolución de problemas sociales. [39]

Mientras tanto, el papel del hombre en la institución del matrimonio y la familia es fundamental. De hecho, es el hombre quien, expresando su amor a la mujer y pidiendo su mano, comienza el proceso de la creación de una familia [40]. Es por lo tanto que en las fuentes islámicas, para referirse al matrimonio, se usa el término árabe Nikaḥ que significa relación sexual legítima entre las parejas casadas. [41] Este es un tipo de relación sexual que se autoriza en base a ciertos principios y un profundo compromiso entre las parejas para garantizar su unión mental y emocional, además de su unión sexual. [42]

Sin embargo, no debemos olvidar que el propósito del matrimonio no es la mera satisfacción sexual. El propósito mayor que cumple este vínculo es la creación de una unión emocional que puede proporcionar un entorno emocionalmente seguro para la educación del niño y el desarrollo de la pareja. Estos beneficios y bendiciones no se pueden obtener excepto a través de la promoción del matrimonio, un contrato que mediante la prohibición de las relaciones ilícitas, hace que un hombre y una mujer pertenezcan exclusivamente entre sí. [43]

Debemos tener en cuenta que reprimir un impulso natural y no satisfacerlo de manera legal puede conllevar consecuencias físicas y psicológicas adversas. [44] Esta es la razón por la que muchas personas, que no se casan en una edad temprana, sufren diversos problemas psicológicos, como ansiedad, mal humor, incapacidad para concentrarse, indiferencia excesiva, desesperanza y pesimismo excesivo. Por supuesto, el matrimonio puede curar estos desordenes emocionales y psicológicos; por lo tanto, cuando una persona se casa, encontrará tranquilidad con su pareja. [45] El Corán se ha referido a estos grandes beneficios psicológicos y emocionales del matrimonio en varias ocasiones, una de las cuales es la siguiente aleya:

“Y entre Sus señales está el haber creado de vosotros mismos parejas para que encontréis la calma junto a ellas. Y ha puesto entre vosotros afecto y misericordia. En verdad, en ello hay señales para gente que reflexiona.” [46] [47]

Al aceptar el compromiso del matrimonio, un hombre se transforma en un tutor responsable del bienestar de la familia que es la unidad más básica de la sociedad, y más nunca se siente como un individuo sin principios que es libre de tomar cualquier decisión en cualquier momento para su futuro. Este compromiso, le impide tomar decisiones precipitadas que podrían poner en peligro el bienestar de su familia. También asegura la salud sexual de la familia manteniendo la fidelidad entre los conyugues. [48]

 

El hombre y la administración de la familia

Teniendo en cuenta la gran diferencia física y psicológica entre el hombre y la mujer, el Islam encarga al hombre la administración de la familia y la mujer es su ayudante a este respecto. [49] La Sabiduría Divina dicta que las responsabilidades se asignen en función de las habilidades de los individuos. Por lo tanto, el hecho de que el hombre haya sido encargado del manejo de la familia indica que esta tarea pesada está de acuerdo con su capacidad física y psicológica para enfrentar diferentes peligros y desafíos. [50]

Este hecho ha sido referido por el Corán en la siguiente aleya: “Los hombres son los guardianes de las mujeres.” [51]

A pesar de la creencia común, esta aleya no significa que los hombres sean puestos a cargo de la familia como reyes y dictadores. Esto significa que la familia, como cualquier otra organización, necesita un solo administrador para ser dirigida y resolver los problemas que enfrenta. Por lo tanto, considerando ciertos privilegios que el hombre tiene en el marco de las relaciones sociales, se le ha dejado a cargo de la administración de la familia.

Sin embargo, al igual que cualquier otro privilegio, este también viene con obligaciones y responsabilidades. Por ejemplo, los hombres son responsables de asumir los gastos de la familia, mientras que las mujeres no tienen ninguna responsabilidad a este respecto. [52]

Claramente entonces, dado que solo el hombre es responsable de cuidar a la familia y velar por su bienestar, también se le ha dado el poder de tomar las decisiones necesarias para ese fin.

Por lo tanto, el término قوّامون  en la aleya mencionada anteriormente (que significa supervisor o tutor) quiere decir que el hombre está a cargo de la administración de la familia y protegerla contra cualquier peligro que ocurra. Obviamente, esta aleya no significa que el hombre sea el dueño de la mujer, en el mismo sentido que algunos han interpretado erróneamente esta palabra. [53]

En lo que respecta a la mujer, ella es emocionalmente superior al hombre y tiene el privilegio físico de llevar a la próxima generación de la humanidad. Por lo tanto, ha sido encargada de la educación de sus hijos, ya que cuenta con los medios necesarios para ese fin. [54] Teniendo en cuenta que en las mujeres las emociones son más poderosas y en los hombres la razón tiene más prioridad que la emoción, la unión de estas dos hace un equilibrio perfecto para asegurar el desarrollo, el bienestar y la supervivencia de la familia. [55]

Dados los hechos discutidos anteriormente, la opinión de algunos que insisten en promover la igualdad de género se refuta por ser incompatible con la naturaleza de hombres y mujeres. Incluso en las comunidades donde se promueve fuertemente la igualdad de género, la mayoría de los cargos clave en gobiernos y organizaciones todavía se les ofrecen a los hombres. [56]

Tomando en consideración sus enormes diferencias físicas y psicológicas, ¿cómo es posible decir que el hombre y la mujer deben ser tratados por igual en todos los aspectos? [57]Todos creen en el hecho de que la justicia debe ser respetada en la sociedad, y la justicia significa dar a todos el deber y la función para los que fueron creados y que el deber de cualquier persona este compatible con sus cualidades y capacidades inherentes. [58]

Es debido a la promoción de la justicia que el Islam le ha dado al hombre la tutela sobre la mujer en ciertos asuntos, y esta responsabilidad requiere una gran resistencia física y psicológica. [59] De manera similar, le ha dado a la mujer responsabilidades que están de acuerdo con sus capacidades y que no son, de ninguna manera, menos importantes que las responsabilidades del hombre. [60]

 

Los celos del hombre, el protector de la integridad de la familia

Desafortunadamente, en el mundo de hoy, los valores morales están perdiendo su sentido, particularmente en el occidente donde ya no se consideran malas las relaciones ilegales. Los celos masculinos, que son el protector de la integridad de la familia, no solo se están olvidando, sino que ahora se consideran una especie de fanatismo. Esto es realmente un gran desastre porque sin este tipo de celos positivos, es imposible proteger completamente los valores y el honor de la familia.[61]

En las enseñanzas islámicas la expresión “celos del hombre” se refiere al sentimiento natural del hombre hacia la protección de su honor y la nobleza de su familia y la prevención de que otros puedan violar sus derechos e invadir su privacidad. [62] En general, el significado de los celos masculinos se refiere a los sentimientos protectores del hombre hacia las mujeres de su familia. [63] En este sentido, los celos masculinos son una gran virtud moral; que defiende a las mujeres de la familia contra cualquier falta de respeto.

Este sentimiento puede ser tan fuerte que a veces, el hombre está dispuesto a perder su vida para proteger la dignidad y el honor de su familia. [64] Además, el hombre que tiene celos masculinos entenderá perfectamente cómo se sienten los demás con respecto a sus familias, por lo tanto, nunca hará nada para faltarle el respeto o acosar a la esposa o hijas de otra persona. [65]

Por lo tanto, los celos también pueden ser un factor disuasivo contra las relaciones indecentes, porque todos los hombres entienden que tratar de tener relaciones ilícitas con otras mujeres de la sociedad o, aún peor, acosarlas puede poner en peligro a sus propias parientes femeninas. Esto se debe a que cuando el acoso sexual, el asalto o las relaciones ilícitas se vuelven rampantes, naturalmente pondrá en riesgo a todas las mujeres de la sociedad. [66]

Por lo tanto, cuanto más los hombres de la sociedad sientan este tipo de celos, más modesta será la comunidad y más seguras se sentirán las mujeres [67].

Este hecho también se refleja en las narraciones islámicas. Se ha narrado que el Imam Alí () dijo: “Un hombre con celos masculinos nunca comete adulterio.” [68] [69]

Esto se debe a que los celos masculinos y la modestia están entrelazados: cuantos más protectores estén los hombres hacia los miembros femeninos de su familia. [70] Por lo tanto, los celos masculinos además de que proporcionan algún tipo de protección para la familia; son una defensa contra la promiscuidad sexual.

Por el contrario, cuando se socava esta sagrada virtud masculina, no solo la familia, sino la sociedad enfrentarán la inseguridad y la corrupción. [71]

 

El declive de los nobles sentimientos masculinos, la razón detrás del colapso de la institución de la familia y la indefensión de la mujer

De hecho, la relación adecuada entre los hombres y las mujeres se define en función de sus capacidades actuales. En este sentido, el hombre y la mujer se completan mutuamente, y este hecho se ha mencionado en el Sagrado Corán donde se dice: ““Y entre Sus señales está el haber creado de vosotros mismos parejas para que encontréis la calma junto a ellas. Y ha puesto entre vosotros afecto y misericordia. En verdad, en ello hay señales para gente que reflexiona.” [72]

En otras palabras, el hombre y la mujer, cuando se unen en matrimonio, pueden eliminar las deficiencias de los demás y cada uno puede encontrar tranquilidad en compañía de su conyugue. [73]Este tema también ha sido abordado en las narraciones islámicas también. Un ejemplo es la siguiente narración del Imam Alí (P) donde dijo [74]:

“Las mujeres también pueden participar en el Yihad (lucha sagrada) en el camino de Dios realizando bien sus deberes con respecto a sus esposos.” [75]

Por lo tanto, tratar de socavar la identidad masculina en la sociedad bajo el pretexto del feminismo no solo conducirá a la destrucción de la institución del matrimonio, sino que creará un conflicto profundo entre los dos géneros. Este conflicto a su vez conducirá a una mayor tasa de divorcio, violencia doméstica, familias monoparentales y desordenes emocionales en las familias. Dado que la familia es la unidad básica de la sociedad humana, tales problemas dentro de la familia pueden extenderse a la sociedad, creando problemas sociales como la disminución de la tasa de matrimonio, la propagación de la homosexualidad y los problemas sexuales. [76]

De hecho, menospreciar la identidad masculina perjudicará a las mujeres más que a los hombres, ya que los problemas sociales siempre afectan a los miembros más vulnerables de la sociedad. Esta es la cuestión clave que los movimientos feministas ignoran. Estos movimientos promueven la igualdad de género ignorando el hecho de que los derechos y responsabilidades de los seres humanos deben ser compatibles con sus capacidades físicas y psicológicas. Si se ignoran estas capacidades, cualquier ley que se cree para la regulación de los asuntos humanos será injusta e inadecuada. [77]

Notas

________________________________________

[1] Respuestas a preguntas religiosas, pág. 77.

[2] Una selección de Tafsir Nemune, vol. 3, p. 572.

[3] Ibíd, vol. 4, p. 333.

[4] Ciento ochenta preguntas y respuestas, pág. 461.

[5] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 178.

[6] El Mensaje del Corán, vol. 2, p. 454.

[7] La luz de la guía: una serie de enseñanzas morales, pág. 413.

[8] Ibíd. p. 418.

[9] El creador del mundo, p. 143.

[10] Ibíd.

[11] Ibíd.

[12] Ibíd.

[13] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 157.

[14] El creador del mundo, p. 143.

[15] Kitab al-Nikaḥ, vol. 3, p. 111.

[16] Una selección de Tafsir Nemune, vol. 2, p. 65.

[17] Biḥar al-Anwar, vol. 73, p. 141.

[18] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 13, p. 809.

[19] Biḥar al-Anwar, vol. 100, p. 228.

[20] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 13, p. 811.

[21] Kafi, vol. 5, p. 320.

[22] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 13, p. 811.

[23] Cómo ser un esposo o una esposa en la familia, pág. 33.

[24] Will Durant. La historia de la civilización. Vol. 13, p. 443.

[25] El Génesis de la religión, p. 55.

[26] Samuel King. Sociología. P. 428.

[27] El Génesis de la religión, p. 56.

[28] La ética en el Corán, vol. 3, p. 451.

[29] Una selección de Tafsir Nemune, vol. 5, p. 112.

[30] La ética en el Corán, vol. 3, p. 450.

[31] Religiones, preguntas y respuestas, p. 175.

[32] La enciclopedia de Fiqh comparativo, vol. 1, p. 69.

[33] Ibíd, p. 68.

[34] Ibíd, p. 69.

[35] Preguntas y respuestas religiosas, p. 100.

[36] Ibíd.

[37] Ibíd, p. 101.

[38] Cómo ser un buen esposo o una buena esposa en la familia, pág. 16.

[39] Ibíd, p. 17.

[40] Ibíd, p. 18.

[41] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 134.

[42] Kitab al-Nikaḥ, vol. 1, p. 16.

[43] La luz de la guía: una selección de enseñanzas morales, pág. 587.

[44] El cristianismo en el mundo de hoy, p. 62.

[45] Ibíd.

[46] Sura al-Rūm, 21.

[47] El cristianismo en el mundo de hoy, p. 63.

[48] Los problemas sexuales de la juventud, p. 24.

[49] Una selección de Tafsir Nemune, vol. 1, p. 206.

[50] Ibíd.

[51] Ibíd, pág. 396.

[52] Kitab al-Nikaḥ, vol. 6, p. 115.

[53] Tafsir Nemune, vol. 3, p. 370.

[54] Ibíd, vol. 2, p. 164.

[55] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 9, p. 698.

[56] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 158.

[57] Ibíd, p. 164.

[58] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 164.

[59] Ibíd.

[60] Tafsir Nemune, vol. 3, p. 370.

[61] La ética en el Corán, vol. 3, p. 432.

[62] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 12, p. 311.

[63] La ética en el Corán, vol. 3, p. 431.

[64] Ibíd.

[65] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 12, p. 311.

[66] Ibíd, pág. 504.

[67] Ibíd, vol. 12, p. 312.

[68] Nahyul Balaga: dicho 305.

[69] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 12, p. 312.

[70] Las enseñanzas de los infalibles (P), vol. 1, p. 139.

[71] La ética en el Corán, vol. 3, p. 440.

[72] Sura al-Rūm, 21.

[73] Vocabulario de Tafsir Nemune, p. 39.

[74] Nahyul Balaga, dicho 136.

[75] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minin, vol. 13, p. 123.

[76] La enciclopedia del Figh al-Muqaran, vol. 1, p. 85.

[77] Las leyes prácticas para las mujeres, p. 14.

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