Cuando echamos un vistazo al mundo de hoy observamos que los problemas que pertenecían a las sociedades humanas pre-civilizadas, como el racismo y la discriminación, todavía existen en esta era moderna de las civilizaciones humanas en otras formas diferentes. [1]

De hecho, las consecuencias catastróficas del racismo han plagado al mundo y han herido profundamente el sentimiento de muchas comunidades. [2]

Esto se debe a que mientras las raíces y los orígenes de esta persistente crisis del mundo humano no se hayan analizado adecuadamente, será imposible combatirla de manera efectiva. [3]

Básicamente, a través del mismo tipo de análisis, se pueden encontrar y aclarar las raíces de todos los problemas del mundo moderno para todos. [4] La importancia de este problema radica en el hecho de que, para abordar adecuadamente problemas como el racismo, primero hay que aumentar la conciencia pública sobre ellos. Además, los medios necesarios para descubrir las raíces de estos problemas globales son una serie avanzada de ciencias humanas. Por lo tanto, el desarrollo de las ciencias humanas es un prerrequisito para la exploración de las raíces del racismo y otros problemas del mundo humano. [5]

La naturaleza del racismo

El racismo es la creencia en la superioridad de una raza sobre otra, lo que a menudo resulta en discriminación y prejuicio hacia las personas por motivos de raza, origen étnico o geografía. En el racismo, el color de la piel, el origen étnico, etc. forman la base de la división entre los seres humanos. [6]

Esta creencia ha llevado a muchos pueblos de diferentes rincones del mundo a creer que son la raza superior. Desafortunadamente, los restos de tales creencias continúan existiendo en algunas comunidades en la era actual y moderna. [7]

Este problema, que se deriva de un espíritu de dominación, arrogancia, prejuicio y obstinación, conduce en última instancia al ascenso de los racistas al poder en el mundo. [8]

De hecho, el racismo y otros tipos de prejuicios irracionales obstaculizan el poder de la razón del hombre e impiden su buen juicio, lo que le impide tomar la decisión correcta. [9] Además, este enfoque injusto de los méritos humanos ha permitido juzgar de forma injusta a los seres humanos basado en su raza, etnia y clase social, sin tener en cuenta sus virtudes humanas y sus méritos personales. [10]

 

El racismo y la búsqueda de la supremacía

Vicios morales como el egoísmo, la búsqueda  de la supremacía y la ostentación son de las manifestaciones del racismo. [11] La importancia personal, por un lado, hace que uno se crea a sí mismo superior a todos los demás y, por otro lado, el egocentrismo lo lleva a luchar por la supremacía en todas las empresas y esfuerzos sociales. [12]

Una persona egoísta solo piensa en sí misma en todos los aspectos de su vida; por lo tanto, cuando surge un problema, esa persona solo se preocupa por sus propios intereses y no tiene la más mínima consideración por los intereses de los demás. [13]

En la etapa final del racismo, la persona intentará subyugar a todas las demás personas, basándose en su actitud dominante, a través de más riqueza, más poder, o simplemente llamando a su raza la raza superior. [14]

Aunque los vicios morales mencionados anteriormente tienen diferentes formas y manifestaciones, tienen una raíz en común, es decir, el racismo. [15] Vale la pena señalar que el egoísmo y el hambre de supremacía y poder impiden que uno acepte la lógica y se someta a la verdad. Es por esto que una persona egoísta que busca ganar dominio y poder sobre otros finalmente caerá en el racismo.

Según esta visión del racismo, quizás el primer ser racista fue Satanás; quien desobedeció el mandato de Dios debido a sus sentimientos racistas. Cuando Dios le ordenó que se postrara ante Adán, se negó a hacerlo ya que consideraba su raza, que fue creada a partir del fuego, superior a la raza del hombre, como fue a partir de la tierra.

Esta comparación entre el origen de su propio aspecto material y el del hombre lo llevó a la conclusión de que, el fuego era superior al barro, y por lo tanto, los genios eran superiores a los hombres en todos los aspectos.

Sin embargo, él no se daba cuenta de que el fuego y la tierra eran solo los aspectos materiales de los dos seres y que sus aspectos y cualidades espirituales eran más importantes. Por lo tanto, sin tener en cuenta la superioridad espiritual del hombre y basando su juicio en su aparente superioridad física concluyó que era superior al hombre e incluso desobedeció el mandato de Dios debido a sus sentimientos racistas. [16]

En realidad, la arrogancia de Satanás y su desobediencia al mandato de Dios de postrarse ante Adán creó un velo entre él y la verdad, impidiéndole comprender las verdaderas realidades del mundo. Él, como no era consciente de muchas realidades, se creyó superior al hombre y le dijo a Dios: "Yo soy mejor que él. A mí me creaste de fuego y a él lo has creado de barro." [17]

Esta arrogancia llevó a Satanás a cuestionar el mandato de Dios y desobedecerlo, algo que hizo que cayera en la incredulidad y fuera expulsado del Paraíso. [18]

Esto indica que la raíz del racismo es el engreimiento y el egoísmo, que se manifiestan en forma de alardear y jactarse y gradualmente se convierten en problemas mayores, como la extrema arrogancia y la lucha por la supremacía y la dominación. [19]

El racismo, el amargo fruto de la arrogancia y la in tolerancia

La arrogancia se define como un sentido extremo de la arrogancia y la in tolerancia hacia cualquiera que piense de manera diferente a esta persona. [20]

Se puede afirmar que la in tolerancia es el fruto de la ignorancia y la presunción, porque una persona que es presumida por lo general se esfuerza por mostrarse mejor o superior a los demás al elevar a cualquiera y cualquier cosa que esté relacionada con él. [21]

Una investigación detallada de los efectos físicos y espirituales de la arrogancia y el fanatismo en los seres humanos, así como sus efectos en la vida personal y social del hombre, revela que ninguno de los vicios morales es más destructivo para la vida del hombre que la arrogancia y el fanatismo. [22]

Vale la pena señalar que cuando la arrogancia y el fanatismo se conviertan en las cualidades de carácter comunes de una comunidad, se fusionarán con lo que se conoce como racismo. Esto se debe a que estas cualidades de carácter negativo llevan a los miembros de tales comunidades a considerarse a sí mismos, o más precisamente a su raza, mejor que todos los demás. [23]

Claramente entonces, tales ideas racistas han sido el origen de la mayoría de los desórdenes sociales, las guerras, y el colonialismo. [24] Estas consecuencias adversas del fanatismo racista y la arrogancia han plagado al mundo humano desde la antigüedad hasta la era moderna actual. [25]

A lo largo de la historia, algunas naciones se consideraban superiores a otras naciones y razas, debido a estas mismas opiniones e ideas falsas, por las que sentían que tenían derecho a esclavizar a otras naciones que consideraban inferiores. Tales sentimientos de superioridad sin fundamento incluso han llevado a los árabes más atrasados ​​y bárbaros de la era preislámica a considerarse a sí mismos como la "raza superior". [26]

En la era contemporánea, los ejemplos más recientes de tal supremacía racista fueron la falsa creencia de los alemanes nazis de que la raza alemana era superior a todas las demás. De manera similar, los sionistas creían en la superioridad de los judíos sobre todas las demás personas y en África, el sistema de apartheid creía en la llamada supremacía blanca.

Cada uno de estos movimientos racistas causó mucho sufrimiento a la humanidad, algunos de los cuales fueron los causantes de terribles guerras mundiales y civiles. No obstante, todos estos movimientos tenían una raíz común: se basaban en la supremacía racial, el fanatismo y la arrogancia. [27]

Las potencias racistas siempre han tratado de colonizar y extorsionar a otras naciones, ya que se consideraban la "raza superior"; por lo tanto, han iniciado guerras para ocupar los países de otra nación y colonizarlos. [28]

De acuerdo con la evidencia histórica sobre los árabes paganos preislámicos, las tribus árabes tuvieron dos guerras principales y sangrientas entre sí antes de la llegada del Islam. Las consecuencias más recientes del racismo son las dos guerras mundiales que tuvieron lugar en el siglo XX, dejando a millones de personas muertas y decenas de millones de heridos, y causaron una destrucción masiva en un gran número de países de Europa y otras partes del mundo.

En la era actual, las atrocidades israelíes cometidas contra el pueblo palestino son otro terrible ejemplo del racismo. Estas atrocidades se cometen solo por la supremacía racial y el fanatismo religioso que han llevado al sionista a creer que son la "nación elegida" y superiores a todas las demás. [29]

El racismo envuelto en el nacionalismo

De hecho, todas las personas aman su tierra natal, raza y etnia. Esto no debe tomarse como algo negativo; a pesar de que el amor por la tierra y la etnicidad propia puede ser un factor constructivo que nos incentive a colaborar en diferentes emprendimientos sociales.

Este sentimiento si alcanza su extremo, se convertirá en un factor destructivo e incluso desastroso que puede poner en peligro a toda la humanidad. [30] Esto se debe a que el nacionalismo está estrictamente limitado a los límites de un determinado país y, a veces, a un determinado grupo étnico, y generalmente está imbuido de sentimientos e ideas racistas. [31]

El nacionalismo radical puede considerarse uno de los errores más grandes de la humanidad y una especie de retroceso a la mentalidad y al sistema de creencias de las personas incivilizadas [32]. El nacionalismo, en su forma extrema, hace que cualquier grupo étnico o los seguidores de una religión determinada trabajen arduamente para fortalecerse y crear su historia basada en su propio conjunto de creencias en una determinada ubicación geográfica. [33] Finalmente, cuando se convierten en una nación, intentan separarse del resto del mundo, creando fronteras alrededor de sí mismos y protegiéndolas con su poder militar. [34]

Se puede afirmar que en muchos casos, la defensa obstinada y ciega de la propia etnia, raza y nacionalidad ha sido la raíz de muchas guerras. También ha sido un factor para transmitir supersticiones y tradiciones erróneas bajo el nombre de tradiciones tribales y étnicas. [35]

Una defensa tan irracional de la propia etnicidad y nacionalidad podría llevarnos a tratar de justificar las faltas más terribles en nuestro pueblo y, al mismo tiempo, denunciar las buenas acciones de una buena persona que pertenece a otra nación. Lo mismo ocurre con las buenas y malas tradiciones y costumbres. Desde el punto de vista de un extremista nacionalista, las costumbres y tradiciones negativas de su nación podrían parecer justificables, mientras que las tradiciones positivas de otras naciones podrían considerarse reprensibles. [36]

En tales condiciones, los prejuicios raciales ocuparán el lugar del verdadero humanismo, lo que llevará a disputas y guerras entre naciones, haciéndoles olvidar que, antes que nada, deben estar unidos como seres humanos. Además, las inclinaciones nacionalistas y racistas constituyen un obstáculo importante para la promoción de la justicia. [37] [38]

Debido a estas creencias negativas, los gobiernos humanos siempre han tenido prejuicios racistas y étnicos, o al menos estaban inclinados hacia su partido político específico a pesar de estar fingiendo defender los derechos humanos.

Tales gobiernos son los guardianes de los intereses de unas pocas personas poderosas. De hecho, los gobiernos occidentales aplican ciertas políticas que claramente apuntan a reactivar los movimientos nacionalistas y racistas locales con el fin de crear división entre otras naciones y eliminar su cultura. [39] El egocentrismo de estos gobiernos y su intento de subyugar a otras naciones a las que consideran inferiores perturban el orden de la comunidad humana y destruirá la amistad entre las diferentes naciones. [40] [41]

Un ejemplo de tales guerras son la Primera Guerra Mundial y la Segunda Guerra Mundial que fueron provocadas debido a las inclinaciones racistas de los alemanes nazis. [42] Como fue señalado anteriormente, cuando el nacionalismo alcanza su extremo, es capaz de provocar incluso las guerras mundiales.

El extremismo en el apoyo a cierta etnicidad, idioma o país es un factor de división que puede destruir las sociedades humanas y crear división entre los seres humanos. Los alemanes nazis, quienes pensaban que la raza alemana era la raza superior, provocaron las guerras más terribles del siglo XX, destruyendo todos los logros económicos y culturales de muchas naciones. [43]

Hoy en día, el problema del racismo aún existe en el mundo humano, mientras que la clave para el desarrollo de todas las naciones es aceptar todas las etnias y clases de personas en la comunidad para poder beneficiarse de sus potenciales. Sin duda, esta sociedad se desarrollará rápidamente en todos los aspectos, incluidos los económicos, políticos, culturales e incluso militares. [44]

Desde este punto de vista, todas las razas y etnias deben considerarse iguales y ningún grupo étnico debe ser privilegiado sobre los demás simplemente por su raza. Desde el punto de vista islámico, todos los seres humanos, independientemente de su etnia, son iguales ante Dios. [45]

Tal vez lo único que puede mantener los sentimientos nacionalistas bajo control y llevarlos a niveles razonables y racionales es la religión. Esto se debe a que la religión es de naturaleza transnacional, por lo que considera a todos los seres humanos iguales, independientemente de su color de piel y origen étnico. [46]

Se puede afirmar que la religión es el único factor unificador en todas las sociedades que puede eliminar las fronteras y unir a todos los seres humanos con diferentes idiomas, razas y nacionalidades bajo una sola bandera. [47]

 

El racismo y el Intelecto aristocrático

El punto de vista de los ricos y poderosos, conocido como “el intelecto aristocrático”, considera que la clase media y cualquier persona que tiene menos riqueza y poder que ellos, son inferiores. [48] Esta perspectiva es totalmente ajena a las elevadas virtudes de los individuos y toma solo la cantidad de riqueza, propiedades y poder como criterio para evaluar el valor de los seres humanos.

Basado en esta perspectiva, la justicia, la piedad y las virtudes humanas se toman para nada y en su lugar se valoran las casas lujosas, los automóviles y la ropa como criterios para evaluar el hombre. Esta perspectiva ha provocado un cambio drástico en la comunidad humana, separando a las personas de las virtudes humanas y llevándolas al abismo del materialismo. [49] Hoy en día, los ricos ridiculizan a los desfavorecidos como personas despreciables. Les faltan el respeto solo porque no tienen mucha riqueza o poder, sin importar las grandes ideas que tengan en mente. Por lo tanto, independientemente de su valor como seres humanos capaces, los desfavorecidos reciben un trato despectivo debido a su falta de poder y riqueza. [50]

Este tipo de racismo moderno no es el único o el peor caso de racismo contra las personas desfavorecidas. Una breve mirada a la era de la esclavitud revela que esa época oscura de la humanidad surgió como resultado de la misma perspectiva que fue apoyada por los ricos y los que sostenían el poder. [51] Esto se debe a que el capitalismo es un sistema diseñado para que los ricos se vuelvan más ricos y, para que algunas personas lleguen a ser esclavizadas y explotadas con el fin de que los ricos ganen más riqueza. [52]

Además, para afectar y esclavizar las mentes de otras naciones, los escritores occidentales crearon mitos que indican que los blancos del oeste son la raza superior, ya que son más inteligentes y poderosos que otras naciones. Este mito ha sido producto de las mentes egocéntricas de los escritores occidentales, creado con el fin de afectar las mentes de otros pueblos. [53] Sin embargo, como cualquier otro sistema injusto, estos sistemas económicos y políticos que se construyen con base en el racismo o privilegios relacionados con la clase no durarán mucho, ya que hoy en día, las personas se están levantando de vez en cuando en diferentes rincones del mundo contra la discriminación racial y la superioridad de algunas clases.

Tales levantamientos pueden considerarse una reacción del sentido común de la gente contra el intelecto aristocrático de los ricos y poderosos. [54] Otro ejemplo de tales levantamientos es la lucha a gran escala de las personas de espíritu libre del mundo contra la discriminación dirigida contra las llamadas personas de color. [55]

Es de hacer notar que, mucho antes del surgimiento del nazismo y el fascismo, y mucho antes de que Hitler comenzara su búsqueda de subyugar a todo el mundo a la raza alemana superior, matando a millones de personas en la Segunda Guerra Mundial, los escritores estadounidenses y británicos escribieron teorías sobre la superioridad de ciertas clases, permitiendo el racismo y otros tipos de discriminación racial. [56]

De hecho, los nazis solo siguieron el ejemplo del racismo del color de la piel que prevalece entre los intelectuales y pensadores de la época occidental.

Algunos pueden pensar que estas observaciones pertenecen al pasado y ahora están obsoletas; sin embargo, una mirada a las condiciones en los Estados Unidos indica que todavía existe la misma perspectiva en el país más avanzado del mundo donde los blancos miran hacia abajo a las personas de color como los ciudadanos menos privilegiados. [57] Las ideas racistas son tan poderosas en los Estados Unidos que las personas blancas racistas incluso designaron una recompensa para la cabeza de uno de los líderes moderados de los movimientos negros estadounidenses cuyo lema era "movimiento no violento para promover los derechos de los negros". [58]

Igualmente, muchos turistas y estudiantes del Oriente que visitan Europa han experimentado insultos racistas que les han sido lanzados; estos insultos son los productos del liberalismo utilizados por personas a quienes los liberales consideran inferiores. [59]

Sin embargo, hay que tener en cuenta que la razón por la cual las naciones occidentales buscan hacer que otras naciones crean que la raza blanca occidental es la raza superior en inteligencia y poder es suprimir el sentido de poder y la razón de otros pueblos. De esta manera, otras naciones serían disuadidas de hacer cualquier intento de desarrollarse y permanecerán por siempre sujetos a las órdenes de las potencias occidentales.

Esto es, mientras que las afirmaciones sobre la superioridad de la raza europea no tienen ninguna base, ya que no hay una sola evidencia histórica, lógica o científica que respalde estas ideas racistas. [60] A pesar de las afirmaciones del Occidente sobre los derechos humanos, el problema del racismo aún persiste en los países occidentales más avanzados, especialmente en los Estados Unidos. En los Estados Unidos, las actitudes racistas contra los afroamericanos siguen siendo un problema importante; Los afroamericanos todavía sufren discriminación racial institucionalizada en la sociedad estadounidense, un problema que ha empeorado con el paso del tiempo hasta la era moderna. [61]

 

La aparición del racismo y el papel del darwinismo social

A fines del siglo XIX y principios del siglo XX, el darwinismo social allanó el camino para el desarrollo y crecimiento de las inclinaciones racistas y la expansión imperial en el mundo. El darwinismo social puede considerarse el factor clave en el surgimiento del fascismo y el imperialismo. Esto se debe a que, de acuerdo con esta teoría, cualquier clase de racismo e imperialismo es justificable porque se debe permitir que las razas y etnias superiores subyuguen y eliminen a los más débiles para que la sociedad avance hacia la perfección y el desarrollo. [62]

El darwinismo social está marcando contraste con los principios morales y la justicia social porque, de acuerdo con esta teoría, todo tipo de guerras y derramamientos de sangre en el mundo pueden justificarse en base a la ley de "la supervivencia del más apto". Desde esta perspectiva, todas las disputas y guerras étnicas se consideran naturales y de acuerdo con la ley de la naturaleza y la evolución del ser humano. [63]

Esta teoría sostiene que la guerra y el conflicto deben existir constantemente en el mundo humano, porque la falta de guerra significa la pereza y la degradación de la sociedad. Los defensores del darwinismo social afirman que la guerra y la disputa son evitables para que los poderosos sobrevivan y los débiles sean eliminados. [64]

Cabe destacar que el resultado de tal teoría social sería el racismo, porque cada etnia se consideraría a sí misma la más apta para asegurar su supervivencia. Por lo tanto, se esforzarán por obtener más poder y riqueza para subyugar a otras naciones, y a medida que ganen más poder, trabajarán para destruir a otras naciones más débiles, ya que lo consideran una ley inevitable de la naturaleza. [65] Según el darwinismo social, en la batalla constante entre diferentes razas, solo las razas más poderosas que también están más familiarizadas con las condiciones de su entorno y están equipadas con medios más avanzados sobrevivirán. El resultado natural de este proceso será la subyugación y la aniquilación definitiva de las razas más débiles.[66]

Según los estudiosos, la generalización de la ley de la supervivencia del más apto y su aplicación en la humanidad es solo una trama imperial hecha por los sociólogos capitalistas para justificar el tipo de racismo practicado por las potencias imperiales. Por lo tanto, esta teoría se ha desarrollado como un arma para los imperialistas para justificar sus actos atroces e inhumanos de racismo y discriminación como una ley natural que es necesaria para el desarrollo y el crecimiento de la sociedad humana. De esta manera, no tendrán ningún problema en justificar sus terribles delitos racistas utilizando las teorías científicas. [67]

 

Valorar a los seres humanos desde la perspectiva islámica

La creencia en una "raza superior" entre los seres humanos está estrechamente relacionada con la idea de que hay un "pueblo elegido" cuyos pecadores no enfrentarán el castigo, excepto por un corto tiempo después del cual el Paraíso eterno de Dios será suyo por toda la eternidad. Estos cuentos de hadas son solo una indicación de la arrogancia de algunos pueblos a lo largo de la historia. [68]

La búsqueda de superioridad y privilegios exclusivos por parte de aquellos que afirman ser la raza superior no es de ninguna manera justificable o lógica. Desde la perspectiva islámica, no hay diferencia entre las razas de los seres humanos con respecto a la recompensa y el castigo que recibirán en el futuro por sus buenas y malas acciones. Es decir, la etnicidad de la gente no desempeña ningún papel en la determinación de su recompensa y castigo en el otro mundo; El único factor importante en este sentido son las propias acciones de las personas. [69]

Mientras tanto, según las teorías occidentales y el humanismo, el interés del ser humano es el eje de todas las cosas y, por lo tanto, el criterio de todos los valores es el interés personal. [70] El humanismo ha tenido efectos tan adversos en todo el mundo humano que ahora la avaricia, la búsqueda extrema del placer, la lucha por la supremacía, la lucha por los intereses egoístas y el consumo excesivo se han convertido en normas y valores, mientras que, por otra parte, la piedad, las virtudes humanas y la moral son descartados como conceptos sin sentido y obsoletos. [71]

El racismo de hoy, de hecho es como un árbol cuyas raíces son la búsqueda de placer, cuyo tronco es la búsqueda de intereses egoístas, y está regado con alardes raciales y el consumismo. Naturalmente, tal árbol no dará frutos, excepto la discriminación racial y de clase, y todo tipo de problemas sociales. Además, no se puede esperar que tal árbol de frutos de justicia, moral y espiritualidad. [72]

En tal sociedad, la esclavitud y el racismo toman una nueva forma; Con respecto a este tema, Henry Miller escribe: “Cuando Lincoln firmó la Proclamación de Emancipación, pensábamos que habíamos terminado con la esclavitud, pero lo que realmente sucedió fue que creamos esclavos blancos además de los negros: todos eran esclavos de la era de las máquinas.” [73] [74]

De hecho, el egocentrismo y los prejuicios raciales hacen que algunos acepten sus gustos y rechacen los derechos de los demás. [75] De acuerdo con la ideología humanista, el hombre se acredita en función de su sangre, nacionalidad, etnia, riqueza, estado social y riqueza. [76] En contraste con el humanismo, la religión lucha contra todo tipo de clasificación de los seres humanos según el color de su piel, el origen étnico y la clase social. La religión considera a todos los seres humanos los siervos de Dios y todas las regiones son la tierra de Dios; por lo tanto, considera a todos los seres humanos iguales en las bendiciones que reciben de su Creador. [77]

Basado en esto, todos los mitos que son creados por los seguidores de ciertas religiones, que indican que ciertas razas o seguidores de ciertas religiones son el "pueblo elegido" son totalmente infundados. La conexión de las personas con Dios, a través de Sus profetas, solo es posible a través de una fe verdadera en Él y siguiendo las religiones de los Mensajeros de Dios. [78]

Desde una perspectiva religiosa, el único criterio para la superioridad de una persona sobre otra es el nivel de su fe en Dios y la cantidad de sus buenas acciones basadas en esa fe. Obviamente, en base a esta perspectiva, ni la edad, ni la etnicidad, ni el género, ni la clase social se consideran un criterio para la superioridad de una nación. [79]

Por lo tanto, el único factor que puede hacer que una persona sea superior a otra es, algo que se origina de su espíritu y su mente, es decir, la piedad, la complacencia de Dios, la pureza, la rectitud y otras virtudes humanas. [80]

Notas

[1] El secreto detrás del subdesarrollo del Oriente, p. 44.

[2] Ibíd.

[3] En busca de Dios, p. 144.

[4] El Mensaje del Corán, vol. 3. P. 77.

[5] Grandes Líderes, p. 157.

[6] El Islam en un vistazo, p. 80.

[7] Tafsir Nemune, vol. 22, p. 198.

[8] La ética en el Corán, vol. 3, p. 20.

[9] Tafsir Nemune, vol. 15, p. 354.

[10] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minīn (P), vol. 7, p. 105.

[11] La ética en el Corán, vol. 2, p. 46.

[12] Ibíd.

[13] Ibíd.

[14] Ibíd.

[15] Ibíd.

[16] Ibíd, vol. 3, p. 23.

[17] Tafsir Nemune, vol. 6, p. 103.

[18] Ibíd, vol. 11, p. 399.

[19] Ibíd.

[20] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minīn (P), vol. 7, p. 398.

[21] Ibíd.

[22] La ética en el Corán, vol. 2, p. 60.

[23] Ibíd.

[24] Tafsir Nemune, vol. 3, p. 414.

[25] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minīn (P), vol. 7, p. 398.

[26] Una serie de discusiones éticas. P. 592.

[27] Ibíd.

[28] Una selección de Tafsir Nemune, vol. 2, p. 77.

[29] El Mensaje del Imam Amir al-Mu'minīn (P), vol. 7, p. 399.

[30] Tafsir Nemune, vol. 15, p. 353.

[31] El secreto detrás del subdesarrollo del Oriente, p. 190.

[32] Nuestro Credo [Aṣl al-Shi'a], pág. 43.

[33] La ética islámica como se refleja en Nahj al-Balaga [basada en el sermón de Muttaqīn], vol. 1, p. 278.

[34] Cómo obtener conocimiento de Dios, p. 89.

[35] Tafsir Nemune, vol. 15, p. 353.

[36] Ibíd, p. 354.

[37] Sura al-Ma’ida, 8.

[38] Los objetivos del levantamiento de Imam al-Ḥusayn, pág. 53.

[39] La enciclopedia del Fiqh al-Muqaran, vol. 1, p. 546.

[40] Ética islámica en Nahj al-Balaga [basada en el sermón Muttaqīn], vol. 1, p. 139.

[41] Tafsir Nemune, vol. 15, p. 353.

[42] La ética en el Corán, vol. 2, p. 152.

[43] La ética en el Nahj al-Balaga [basado en el sermón Muttaqīn], vol. 1, p. 140.

[44] El secreto detrás del subdesarrollo del Oriente, p. 190.

[45] La enciclopedia del Fiqh al-Muqaran, vol. 1, p. 546.

[46] Cómo obtener conocimiento de Dios, p. 89.

[47] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 99.

[48] El término "aristocrático" se usa aquí para referirse a la manera en que los ricos menosprecia a la gente común [Mensaje de Imam Amir al-Mu'minīn (P), vol. 11, p. 20].

[49] Tafsir Nemune, vol. 21, p. 86.

[50] Una selección de Tafsir Nemune, vol. 3, p. 382.

[51] Tafsir Nemune, vol. 9, p. 91.

[52] Directrices de la economía islámica, p. 39.

[53] El secreto detrás del subdesarrollo del Oriente, p. 164.

[54] El Gobierno Mundial de Mahdi (P), p. 27.

[55] Ibíd.

[56] El secreto detrás del subdesarrollo del Oriente, p. 164.

[57] Ibíd.

[58] Ibíd, p. 165

[59] Ibíd.

[60] Ibíd, p. 167.

[61] El Gobierno Mundial de Mahdi (P), pág. 45.

[62] Falsos filósofos, p. 147.

[63] Ibíd.

[64] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 248.

[65] Falsos filósofos, p. 147.

[66] Ibíd, p. 136.

[67] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 249.

[68] Ibíd, vol. 1, p. 322.

[69] Tafsir Nemune, vol. 1, p. 322.

[70] La enciclopedia del Fiqh al-Muqaran, vol. 1, p. 550.

[71] Ibíd, vol. 2, p. 57.

[72] Ibíd.

[73] La civilización materialista de nosotros los occidentales, p. 53.

[74] La enciclopedia del Fiqh al-Muqaran, vol. 2, p. 57.

[75] Tafsir Nemune, vol. 1, p. 468.

[76] Ibíd, vol. 22, p. 199.

[77] El Islam en un vistazo, p. 19.

[78] Tafsir Nemune, vol. 2, p. 607.

[79] Una selección de Tafsir Nemune, vol. 2, p. 598.

[80] El Islam en un vistazo, p. 20.